Ahora que empieza el buen tiempo y con ellas las romerias, y fiestas de los pueblos, hay que alzar la vista y denunciar a aquellos que abusan de sus animales, hasta dejarlos morir.
Este caballo, es uno más de los 23 que ha muerto este año en El Rocio, esa romería tan conocida por su Virgen, sus fiestas, y nunca por lo que hay detrás. El año pasado fueron 18, y este ha incrementado. Estos son los caballos que según sus dueños, o personas que los alquilan no tienen ni derecho a una muerte digna. Pero también están esos caballos, mulos y burros, que siguen vivos, y no les dan de beber o comer, los mantienen a pleno sol, y aquellos también que tiran de un carruaje llenos de gente con heridas en los hocicos, los lastimados por espúelas...
Y no hablo sólo del Rocio, sino de todas las romerías.
Si te gustan los animales, cuídalos, disfruta de ellos y dales sus atenciones y cuidados.
